Ahora que ya conocemos el contenido completo del pack El aullido de Blackmane vamos a hacer un análisis detallado de todas las cartas que veremos en su interior.
Para que no resulte demasiado largo vamos partir el artículo en varias partes que iremos completando en los próximos días.
Antes de nada quiero dejar claro que esto es una versión personal, y que puedo estar equivocado a la hora de valorar las cartas. Me encantará debatir sobre las opiniones de cada uno en los comentarios de la entrada. Así que animaros a comentar vuestras propias impresiones :)
- Ragnar Blackmane:
Es evidente que Ragnar (y toda su escuadra como veremos luego) está pensado para ganar el juego matando al señor de la guerra de nuestro oponente, algo que ahora puede ocurrir, pero que en raras ocasiones será nuestra estrategia principal.
Dado que su habilidad sólo funciona si conseguimos cazar al Señor de la Guerra enemigo, nos tocará pensar que puede hacer nuestro adversario a la hora de asignar su Señor de la Guerra a los planetas. Esto en ocasiones puede ser muy evidente, pero en otra mucho más complejo. Si además nuestro oponente es Eldorath Starbane y por tanto puede usar la carta Vaticinio, la cosa puede ser realmente compleja.
Hay que destacar que los 2 daños se los podemos hacer al Señor de la Guerra enemigo o a otra unidad enemiga que haya en el mismo planeta y que nos interese quitarnos de encima.
Sus atributos son bastante buenos para un Señor de la Guerra que debe aguantar en combate, incluso en su cara de Herido, donde su 2/5 es bastante bueno pese a no tener la habilidad.
En cuanto a mano inicial y recursos iniciales no hay novedades que comentar.
- Blackmane Sentinel:
En la escuadra distintiva de Ragnar tenemos 4 copias de estos lobos espaciales. Con un coste de 2 y unos valores de 2/2 más 1 icono de mando, es una unidad que en principio sería bastante normalita. En cambio su habilidad si es bastante buena, pues la posibilidad de moverlos desde donde estén al planeta donde esté Ragnar es algo bastante decente. Y lo es precisamente por que se mueven, no se asignan, por lo que llegarán al planeta en el estado en el que estén en su origen (preparados o agotados). Voy a intentar explicar como funciona esta habilidad para que no haya confusiones.
Lo primero que tenemos que saber es que las reacciones suceden una vez se ha completado el evento que la ha desencadenado, al contrario de las interrupciones, que se disparan antes. Esto quiere decir, que si el Blackname Sentinel está en nuestro cuartel general (HQ) viajará con el señor de la guerra agotado al planeta donde se haya asignado antes de realizar su reacción, pues hay que completar la acción de asignar antes de que su reacción tenga lugar. Si hubiera sido una interrupción, el Sentinel se movería antes de que la asignación del Señor se produjera, y se movería en el estado que estuviese en el HQ (lo que sería mucho mejor), pero no es el caso.
Si se mueve desde otro planeta si lo hará en el estado en el que esté en su origen, es decir, preparado o agotado. Por tanto, es mucho mejor tenerlo asignado a un planeta y que se mueva con la reacción de su habilidad, que asignarlo junto al Blackmane desde el HQ.
Se me ocurre potenciar esta unidad con algo que le de algo de “punch”. Pensáis como yo en el Fusil Iónico??
- Frostfang:
Se trata de una reliquia de coste 2 que sólo podemos asignar a una unidad Lobos Espaciales, y que nos da +2 ATQ +2 PG mientras esté en un planeta con el Señor de la Guerra Enemigo.
A día de hoy no hay más unidades Lobos Espaciales que las que existen en esta Expansión (aunque ya hay alguno más anunciado para el futuro) por lo que lo normal será asignárselo al propio Ragnar, lo que nos da igual poca versatilidad. Ahora bien, ¿Es mejor esta reliquia que un Aura de Hierro? Pues no lo se, pero si tuviera que mojarme ahora, creo que está será una carta que usaremos principalmente de escudos (esos 3 iconos son muy jugosos) más que como mejora real. ¿Qué opináis vosotros?
- Ragnar’s Warcamp:
De este soporte sólo tenemos 1 copia en la escuadra distintiva de Ragnar, y es una pena, pues su habilidad es muy buena, y más si en el futuro hay más lobos espaciales.
El ser una habilidad estática (es decir, que sucede cada vez que se produce al tener un lobo espacial en un planeta con un Señor de la Guerra enemigo, sin tener que agotarla o estar limitada su uso a 1 vez por turno, etc) hace que esta carta sea realmente interesante. Sin embargo, al ser una carta de la que sólo podremos tener una copia en el mazo, no podemos basar nuestra estrategia pensando en que la tendremos en juego. También hay que ver que su coste 3 puede ser difícil de pagar si no tenemos muchos recursos, por lo que puede ser que la robemos pero que bajarla no sea la mejor opción.
- Blackmane’s Hunt:
De esta última carta de la escuadra de Ragnar tendremos 2 copias en nuestros mazos. Los eventos de coste 0 suelen ser apetecibles siempre, y su punto de escudo ya lo hace una carta buena que no nos importará robar. Su reacción, que nos permite asignar a Ragnar a un planeta adyacente al que hayamos escogido originalmente, nos servirá para intentar cumplir su cometido de cazar al Señor de la Guerra enemigo. No me parece mala carta, y nuestro adversario temerá que tengamos esta carta en mano, y mucho más en ese turno tenemos la iniciativa…Además, los Blackmane Sentinel viajarán con Ragnar a donde quiera que termine.
Una vez más, ¿que ocurre si nuestro rival es Eldorath Starbane y tiene la carta Vaticinio? Pues depende de que jugador tenga la iniciativa. Si la tenemos nosotros deberemos hacer nuestro evento primero. Al ser una nueva asignación, Eldorath no podrá usar Vaticinio en este momento (debido a que es una nueva ventana de reacciones sobre la asignación de Ragnar, y no de Eldorath), por lo que sufrirá los daños. Posteriormente, se volverá a la ventana de la asignación de Eldorath, momento en el que podrá usar Vaticinio y escapar de Ragnar. Si es el oponente quien tiene la iniciativa, tendrá que jugar Vaticinio primero, permitiendo usar nuestra habilidad después e intentar cazarle (cosa que no sucederá si nuestro oponente es algo avispado, pues nuestra movilidad es menor que la suya).
Y si nuestro oponente y nosotros desplegamos nuestros Señores de la Guerra en el mismo planeta y quiere usar Vaticinio, ¿Le haremos los 2 daños de la habilidad de Ragnar? Pues de nuevo dependerá de quien tenga la iniciativa. Si la tenemos nosotros podremos disparar la reacción de Ragnar antes de que se mueva a otro planeta, y de este modo hacerle los 2 daños; Sin embargo, si es nuestro rival el que la tiene, podrá jugar Vaticinio y huir antes de que podamos hacer la reacción de Ragnar.
Como he dicho antes, la valoración de estas cartas hay que hacerlas en conjunto. En mi opinión, este Señor de la Guerra llega algo pronto y no tengo claro que el jugar a cazar al Señor de la Guerra de nuestro oponente sea a día de hoy una estrategia factible. Eso sin contar que intentar cazar a Nazdreg o a Zarathur puede ser muy peligroso debido a sus potentes habilidades en combate.
Aun así, si tuviera que hacer un mazo basado en Ragnar intentaría llevar muchas unidades de ataque a distancia (que puedan atacar antes de que el Señor de la Guerra rival se retire) y mejoras o soportes que nos ayuden a mejorar el ataque de nuestras unidades (por ejemplo el Fusil Iónico Tau o el Puesto Avanzado de Catachán). Además cartas con la capacidad Emboscada o el Asalto Orbital se me antojan obligatorias.
Por último hay que tener cuidado con los tiempos. Matar al señor de la guerra rival puede necesitar varios turnos, por lo que tampoco podemos dejar de lado la lucha por los planetas, o puede que la partida acabe antes de que hayamos podido completar nuestro objetivo. Así que tendremos que intentar alargar la partida lo máximo posible, y para eso, tendremos que ganar algún que otro 1º planeta.
¿Qué opináis vosotros de este Señor de la guerra?
El próximo día seguiremos con el análisis de más cartas de este primer Pack de expansión de Conquest.
Que viene la manada! :D
ResponderEliminarCae si o si
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